- Recibe a los niños y niñas, preferiblemente en la puerta del aula y dales la bienvenida. Si ya los conoces, preocúpate de saludarlos por sus nombres.
- Permíteles escoger sus asientos.
- Conversa con tus alumnos y alumnas. No realices sólo un saludo y diálogo general, sino haz un esfuerzo por hablar en forma individual con cada uno de ellos/as durante los primeros días. No es una tarea fácil, pero es posible.
- Realiza actividades grupales desde los primeros días, con el fin de que se conozcan mejor entre ellos/as.
- Incorpora actividades relacionadas con la expresión de sentimientos, para que liberen tensiones, temores, o posibles angustias frente a la entrada a la escuela.
- Proporciona un ambiente seguro, cariñoso, motivador. Ayúdales a sentirse contentos consigo mismos y motivados por las oportunidades de aprendizaje que la escuela les ofrece. Sentirse capaz, poseer una buena autoestima y tener altas expectativas de lo que se va a aprender son condiciones muy importantes para el éxito del niño o niña en la escuela.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)